Contexto
¿Qué son Ozempic, Wegovy, Mounjaro y medicamentos similares?
Son fármacos inyectables originalmente desarrollados para tratar la diabetes tipo 2, que han ganado popularidad por su capacidad para inducir pérdida de peso significativa. Actúan imitando hormonas que regulan el apetito y la glucosa, como el GLP-1.
¿Por qué podrían afectar la eficacia de los anticonceptivos orales?
Estos medicamentos pueden ralentizar el vaciado gástrico, lo que podría interferir con la absorción de las píldoras anticonceptivas. Además, efectos secundarios como vómitos y diarrea podrían reducir aún más la eficacia de estos anticonceptivos.
¿Qué recomendaciones ha emitido la MHRA?
La agencia británica aconseja a las mujeres en tratamiento con estos fármacos que utilicen métodos anticonceptivos adicionales, como preservativos, especialmente durante las primeras semanas de tratamiento y después de cada aumento de dosis. También recomienda evitar el uso de estos medicamentos durante el embarazo, la lactancia y mientras se intenta concebir.
¿Qué implicaciones tiene la pérdida de peso en la fertilidad?
La pérdida de peso significativa puede restaurar la ovulación en mujeres con sobrepeso u obesidad, aumentando así la fertilidad. Esto podría explicar algunos de los embarazos no planificados en mujeres que previamente tenían dificultades para concebir.
¿Qué se sabe sobre la seguridad de estos medicamentos durante el embarazo?
Actualmente, no existen suficientes datos sobre la seguridad de estos fármacos durante el embarazo. Por lo tanto, se recomienda suspender su uso si se planea concebir o si se confirma un embarazo.
Cómo sigue
La creciente popularidad de medicamentos como Ozempic y Mounjaro para la pérdida de peso ha llevado a un aumento en su uso, incluso entre mujeres en edad fértil. La falta de información clara sobre los riesgos asociados con su uso durante el embarazo y su interacción con anticonceptivos orales ha generado preocupación entre las autoridades sanitarias.
Es probable que se intensifiquen las campañas de concienciación sobre la necesidad de utilizar métodos anticonceptivos adicionales durante el tratamiento con estos fármacos.
Además, se espera que se realicen más estudios para comprender mejor los riesgos y mecanismos detrás de estos embarazos no planificados. Mientras tanto, las mujeres que utilizan estos medicamentos deben consultar con sus profesionales de la salud para evaluar los métodos anticonceptivos más adecuados y discutir los posibles riesgos asociados.