Este año se destacó por un incremento sin precedentes en la frecuencia e intensidad de los tornados, con más de 1.700 tornados registrados, 53 muertes y daños estimados en 14 mil millones de dólares. Los expertos vinculan el aumento en la intensidad y frecuencia de tornados al cambio climático, aunque su atribución directa sigue siendo compleja.