La semana pasada el INE presentó los resultados de pobreza por ingresos luego de aplicar un cambio metodológico. El informe concluyó que el 17,3% de los uruguayos se encontraban bajo la línea de pobreza en 2024 (con la fórmula anterior de 2006 el cálculo daba 8,3%). En el caso de los hogares el porcentaje fue de 13,4%.
Durante la presentación de los datos, el director del INE, Marcelo Bisogno, afirmó que “sería el peor de los titulares decir que la pobreza se duplicó porque son dos métricas totalmente distintas”.
La nueva medición (con base en la Encuesta Nacional de Gastos e Ingresos realizada entre 2016 y 2017) relevó cuatro criterios: consumo calórico, hacinamiento, saneamiento y educación. Con esos criterios se analiza si el hogar se encuentra en condición crítica o no.
El informe explicó que la línea de pobreza se construye también teniendo en cuenta la canasta básica total, la alimentaria y la no alimentaria.
En el caso de Montevideo, la pobreza se ubicó en 17,5% (frente al 10% que habrían sido con la metodología anterior).
La canasta básica total se incrementó 7,8% frente a la anterior medición; la básica alimentaria un 11,7% y la no alimentaria un 6,2%. Las mayores variaciones que se observaron en la capital fueron en prendas de vestir y calzado (28%), comunicaciones (117%) y recreación y cultura (57%).
Barrio a barrio
Si bien los extremos se mantuvieron -los barrios más pobres y los menos pobres siguen en la misma situación- hubo zonas que mostraron modificaciones.
Los peores registros se mantuvieron en Casavalle (49,6% desde 35,7% anterior), La Paloma-Tomkinson (44,8% desde 27,3%), Manga (41,5% desde 29,2%), Punta de Rieles-Bella Italia (39,7% desde 29%) y Manga-Toledo Chico (39,1% desde 37,9%).
En sentido opuesto, los cinco barrios con menores niveles de pobreza fueron Carrasco (0,7% desde 0%), La Blanqueada (1,7% desde 0%), Palermo (2,8% desde 0%), Parque Rodó (3,2% desde 0%) y Cordón (3,2% desde 0%).
Alejados de las puntas, otros barrios mostraron saltos significativos entre las dos mediciones. El caso más notorio es el de Flor de Maroñas que pasó de 5,4% a 37%. Otros fueron los de Jardines del Hipódromo que se ubicó en 27,8% desde 6,9% anterior y Colón sureste-Abayubá (35,7% desde 14,5%).
Explicación de la nueva línea de pobreza
El doctor en Economía Matías Brum escribió un hilo en X en el que explicó algunos de los cambios que incluyó la nueva medición.
Embed - https://publish.twitter.com/oembed?url=https://x.com/Matias__Brum/status/1921918492183253401&partner=&hide_thread=false
Indicó que la línea de pobreza de 2006 del INE se basaba en datos de Montevideo y patrones de consumo del quintil medio en 2005 y 2006. Añadió que aunque se actualizó por inflación, su estructura nunca cambió y por lo tanto “medía la pobreza con lentes de hace 20 años”.
Brum expresó que en 2017 el INE reconstruyó la línea desde cero, utilizó mejor metodología, consideró patrones de consumo más actuales y calculó líneas distintas para Montevideo, otras ciudades e interior rural.
El resultado fue que la canasta de consumo es más exigente, el umbral monetario de pobreza sube y se detectan más hogares pobres que antes.
“¿Nos empobrecimos de golpe? No, simplemente la línea anterior subestimaba la pobreza”, escribió.
“El cambio no implica que Uruguay esté peor. Significa que ahora tenemos una foto más nítida de la pobreza. Y esa es una buena noticia para las políticas públicas”, concluyó.