Este viernes, el emblemático reloj de la Puerta del Sol en Madrid activará por primera vez en su historia el llamado 'modo canario', atrasando su hora una hora desde las 09:00 hasta las 21:00 horas. Esta iniciativa busca conmemorar el Día de Canarias y mostrar la hermandad entre la capital española y esta comunidad autónoma.
Una lona con la bandera canaria decorará la Real Casa de Correos
Para acompañar este gesto simbólico, en la fachada de la Real Casa de Correos —sede del Gobierno regional madrileño— se desplegará una lona con la bandera del archipiélago y el motivo de la celebración. Este emblemático edificio alberga el reloj que ha marcado el pulso de Madrid desde 1866.
Autoridades madrileñas y canarias celebran la iniciativa
El consejero de Presidencia, Justicia y istración Local de Madrid, Miguel Ángel García Martín, acompañó al viceconsejero de Presidencia del Gobierno de Canarias, Alfonso Cabello, y al consejero de Actividad Física y Deportes, Ángel Sabroso, en una visita al reloj. Durante el encuentro, García Martín destacó la importancia de esta acción: “El reloj de la Puerta del Sol, por primera vez en su historia, durante doce horas va a dar la hora canaria para tener ese gesto de cariño hacia todo el pueblo canario, pero especialmente hacia los 120.000 canarios que viven en nuestra región y sentimos ya como madrileños”.
Canarias en Madrid: una tradición que crece
Esta no es la primera vez que Canarias se hace presente en Madrid con actividades culturales y deportivas. El pasado 17 de mayo, la Plaza de Callao acogió una exhibición de lucha canaria en el marco de la vigésima jornada del Torneo DISA, uno de los más destacados eventos dentro de la programación del Mes de Canarias. Esta celebración incluye más de 75 actos que ponen en valor la cultura y patrimonio canario tanto en las islas como en el resto de España.
El renovado reloj de la Puerta del sol
Recientemente, el reloj de la Puerta del Sol pasó por una revisión integral, la primera en treinta años, que permitió desmontar y limpiar todas sus piezas, incluyendo las que marcan las horas, los cuartos y las agujas. Esta restauración fue llevada a cabo por un equipo de relojeros especializados que mantienen en perfecto estado este símbolo histórico madrileño desde su instalación en el siglo XIX.