Uno de los jóvenes que terminó herido en el accidente en Manantiales ocurrido el 4 enero de 2023, en el que murieron dos modelos argentinas, firmó un acuerdo reparatorio "simbólico" con el argentino Nicolás Rocca, único imputado por el choque, para eximirlo de la responsabilidad de las lesiones que sufrió, confirmaron fuentes del caso a El Observador.
El joven, que viajaba como acompañante de Rocca, firmó un acuerdo por el que no obtendrá dinero en una audiencia realizada este lunes, en protesta por la decisión del fiscal de Maldonado Sebastián Robles de imputarle a Rocca las "lesiones culposas gravísimas" que sufrió en el accidente, ya que entiende que el choque no fue su responsabilidad.
Fuentes del caso explicaron que el Código Penal permite firmar acuerdos reparatorios "simbólicos" que tienen como consecuencia jurídica la extinción del delito imputado. Son presentados en forma conjunta por ambas partes, y deben ser ratificados en una audiencia.
Por esto, Rocca no será juzgado por las lesiones del joven, llamado Juan, en el juicio oral que se desarrolla desde finales de abril, en el que Fiscalía pidió ocho años de prisión para el argentino por el delito de homicidio culpable.
La declaración del acompañante de Rocca que pone en la escena del crimen a un polémico testigo
En su declaración al fiscal Robles y a la justicia, Juan afirmó que cerca de las 13:00 del 4 de enero salió junto a Rocca y tres mujeres de un after en la chacra La Malcriada, ubicada entre las rutas 9 y 104 del interior de Maldonado, en el auto Volkswagen Nivus del argentino.
El joven, también de nacionalidad argentina, afirmó que vio manejar a Rocca en buenas condiciones, sin "exceso de velocidad" y sin maniobras imprudentes, aún cuando se comprobó que había consumido varias drogas en las horas previas al accidente –al igual que las argentinas fallecidas–.
Cuando estaban en la Ruta 104, vieron una "camioneta utilitaria" con un ploteo de una marca de vinos que quería rebasarlos.
Juan relató que la camioneta los rebasó "por izquierda", por la senda contraria de la vía, y cuando terminó de pasarlos vieron de frente y en su carril al auto Ford K en el que iban las argentinas, con el que chocaron instantes después.
El joven afirmó que tras el accidente estaba lúcido, pero minutos después se desmayó. Pasó por más de nueve cirugías y perdió más de dos metros de intestino, lo que lo llevó a perder más de 20 kilos, sumado a distintas secuelas psicológicas.
Fuentes del caso indicaron que la descripción de la camioneta utilitaria coincide con el vehículo que conducía Augusto, uno de los testigos presentados por Fiscalía que aseguró haber visto el accidente, pero que fue cuestionado por la defensa de Rocca, encabezada por los abogados Pablo Donnángelo y Eduardo Sasson, por cambiar en reiteradas oportunidades su relato sobre los hechos.
El hombre cambió su relato de los hechos en cuatro ocasiones. En su última declaración dijo se le había roto el auto y había quedado a un costado de la ruta, cuando vio al auto de Rocca pasar "a toda velocidad" y lo siguió. Allí fue cuando vio el accidente.
Sin embargo, tras su declaración los defensores del conductor argentino le consultaron si había realizado "más declaraciones" y él lo negó, lo que fue rápidamente contraatacado con los abogados con el relato de los diferentes testimonios.
Luego, afirmaron que el pasado jueves 24 de abril Augusto se comunicó con Ignacio Durán, exabogado de Rocca, para consultarle si se podía ar con el imputado "porque tenía información para ayudarlo". El mensaje fue enviado por WhatsApp y se eliminaba tras una escucha, pero Durán lo grabó con otro celular y se los envió a Donnángelo y Sasson. Tras escuchar el audio frente al juez, el testigo dijo que "lo hackearon" y armaron su audio "con IA".
En la pasada audiencia del juicio, celebrada el 7 de mayo, los abogados mostraron un video con el que, aseguran, desacreditaron la versión de Augusto. Donnángelo indicó que la grabación, tomada por una cámara de una chacra ubicada a 3,3 km del lugar del choque a seis minutos de que ocurriera, muestra que Augusto iba "50 segundos" por detrás de Rocca en la Ruta 104.
Según el abogado, para que el relato de Augusto sea "verosímil" tendría que, en pocos minutos, haber pasado a Rocca, parado a 450 metros del choque (punto que el propio testigo marcó) y luego haberlo seguido nuevamente hasta ver el accidente.
