En tanto, las defensoras públicas que representan a Remo, Andrea Bravo y Rosario Silveira, afirmaron que su cliente es "el gran perdedor" de esta historia, y remarcaron que no tuvo "intención ni directa ni indirecta" de matar a su familia. "Jamás se imaginaría la muerte de sus hijos, a quienes adoraba, ni de su pareja. No tenía motivos. Lo único que se le puede acusar es de haberse dormido", afirmaron.
Las primeras audiencias contaron con el relato de varios testigos presentados por la Fiscalía: familiares de la pareja asesinada, vecinos de las viviendas en las que vivían, y policías y bomberos que estuvieron presentes en el lugar y realizaron las pericias, que determinaron que el incendio fue "hipotético accidental".
El paso a paso del incendio, según el relato de testigos
Incendio en casa abandonada de Villa Española
Incendio en casa abandonada. (Archivo)
Foto: captura de pantalla de Telemundo de Canal 12
Jimena, vecina de Daiana y Remo y excuñada de la mujer, no podía dormir en la madrugada del 22 de mayo de 2022. Hacia un tiempo sufría de insomnio, y se quedaba "toda la noche mirando Netflix", según relató ante el juez Penal de 41° Turno, Nilson Álvarez.
Esa noche, como otras tantas, escuchó a su excuñada discutir a los gritos con su novio desde su casa, ubicada a pocos metros en un complejo de viviendas del Parque Guaraní, hasta las 03:00.
Ella, como las dos hermanas de Daiana, Victoria y María, relataron que la vieron varias veces con "moretones" en los brazos. También indicaron que Leonardo le limitaba el o con familia y amigos. Se habían separado varias veces pero ella lo perdonaba, porque era el padre de sus hijos y le importaba "la familia".
En las horas siguientes de la madrugada del incendio Agustina, vecina de la pareja, vio varias veces a "Leo" fumando en la puerta de su hogar. No vio al implicado drogarse, pero dijo que "tenía cara" de que estaba consumiendo algún estupefaciente.
El fiscal Pacheco denunció que Remo Leonardo estuvo consumiendo pasta base y cocaína durante esa madrugada. Varios testigos confirmaron que el hombre era adicto, y cuando a su excuñada le consultaron si él trabajaba, contestó: "Vendía droga". Una de las hermanas de Daiana, en tanto, afirmó que la víctima había comenzado a consumir cocaína e incluso le había planteado que "no quería vivir más", porque veía que "no podía salir" de su adicción y de su situación.
Pablo, vecino de enfrente, estaba con unos amigos cuando cerca de las 06:00 un hombre pasó por la puerta de su casa y le ofreció un bidón con cinco litros de nafta, pero rechazó la oferta. El que la aceptó fue "Leo", que compró el bidón y lo metió a su casa.
A las 06:00, Jimena estaba viendo la tele y de un momento a otro su pared se iluminó. Se dio vuelta para ver la ventana y vio fuego. "Bajo corriendo y le empiezo a gritar a Daiana que se le estaba prendiendo fuego la casa, empecé a llamar a los vecinos".
A esa hora Agustina estaba intentando dormir, algo que le costaba por los ataques de pánico que sufría, cuando sintió "gritos". Giró su cabeza y vio fuego en su ventana.
Lo primero que hizo fue llamar a sus hermanas, porque pensó que podía haber fuego en su casa, y en ese momento su padre le pidió un balde de agua para ir a ayudar. Luego quedó en estado de shock. Fue entonces cuando escuchó un grito de ayuda: era Leonardo, que le decía de un balcón a otro que su casa "se prendía fuego y no podía salir". Le dio la mano y lo metió en su casa, pero cuando giró a verlo había desaparecido en cuestión de segundos.
Héctor, policía de la Unidad de Respuesta Policial Móvil (URPM), estaba realizando un patrullaje a unas pocas cuadras junto a otro compañero cuando, sobre las 06:30, les notificaron de un incendio en la calle Pantaleón Pérez. Tanto él como varios vecinos relataron que intentaron entrar a la casa para sacar a la madre y sus dos hijos, pero todos concordaron en que "era imposible" por el calor que salía del hogar.
Lograron romper la puerta del primer piso, que estaba trancada, pero solo los bomberos –que llegaron cerca de las 07:00– pudieron entrar desde allí a la casa para sacar a las tres víctimas, que estaban en el piso superior del hogar.
Algunos testigos vieron a una persona "morena" meterse a la casa, pero rápidamente tuvo que salir. Estuvo internado en CTI por la intoxicación que sufrió. Pablo dijo que fue la misma persona que le ofreció el bidón.
Durante esas tareas, fueron también varios los vecinos que vieron a Leonardo en shock por los alrededores de la casa. Muchos lo escucharon decir "ya está, Daiana, ya está, ya está". Otros le preguntaban, en medio del desconcierto, "por qué no se metía" a sacar a su familia, pero no obtenían respuesta.
Las ambulancias fueron las últimas en llegar, por lo que los policías se encargaron de llevar a los heridos. Norberto y Gastón, oficiales de las otras dos patrullas que llegaron al lugar, se llevaron a los bebés a la Policlínica Malinas donde fallecieron al poco tiempo de ingresar.
Tras salir del centro de salud Norberto llamó a su compañero, que le dijo que había trasladado a la madre de los chicos al Hospital Pasteur, donde murió esa misma jornada. Los tres fallecieron producto de la intoxicación por los humos del incendio.
Una de las principales preguntas a las personas cercanas a Daiana fue dónde estaba "Domi", el hijo mayor de la mujer que había tenido con su otra pareja. Sus familiares respondieron que, por suerte, ese día se quedó con su padre, Robert, quien contó que su hijo le contaba las discusiones y agresiones que vio entre su madre y Leonardo. Una de las hermanas de la madre dijo que el niño "le tenía miedo".
Un incendio "hipotético-intencional"
20240410 Bomberos, camión de bomberos
Foto: Inés Guimaraens
En la tercera audiencia Fiscalía convocó a Sergio y Alexander, dos bomberos que formaron parte de la redacción de la pericia sobre el incendio. En sus declaraciones, afirmaron que el fuego de la casa tuvo dos focos diferentes que no pudieron ser vinculados entre ambos: uno de ellos estaba en dos sillones ubicados en el comedor de la planta baja, y el otro en el descanso de la escalera que daba al segundo piso.
Sergio, del Departamento de Investigación de Siniestros, indicó que se realizaron cuatro simulaciones para determinar cómo se originó el fuego.
Primero colocaron un cigarro cerca de los sillones, pero no tenía la fuerza necesaria para iniciar por sí solo el crimen. Tampoco si metían el cigarro en el recipiente con nafta, ubicado cerca del sillón. Luego simularon prender fuego un sillón tras rociarle combustible, pero no llegaba al nivel de combustión que se presenció en la escena. La única simulación que alcanzó a ese nivel fue la que incendió los dos sillones del comedor con nafta.
La conclusión de los bomberos fue que el incendio fue "hipotético-intencional". Hipotético, porque al no estar presentes en el lugar ni contar con cámaras de la casa los peritos no tienen "la cadena de acontecimientos" completa. Intencional, porque el "conjunto de evidencias más el testimonio recabado confirman una determinación de origen de incendio" de esa naturaleza, "no habiendo elementos para sospechar una situación accidental".
"Para dar inicio al incendio se tuvo que haber aportado algún elemento con llama al descubierto sobre el líquido acelerante (nafta) en lo que respecta a planta baja", agregó Sergio, quien aclaró que en el foco de la planta alta no se encontró ese líquido. Según Alexander, una pila de prendas de ropa que fue alcanzada por el fuego podría haber causado esa segunda combustión, más cercana al lugar donde estaban las víctimas.
Las defensoras de Leonardo consultaron a los peritos sobre distintas variantes que podrían haber influido en el incendio y que no estaban en el informe de Bomberos.
Consultaron: si la cocina estaba encendida; si un celular o algún elemento con cargas electrostáticas, o algunos "elementos químicos" podían causar la combustión; si las telas o un cubo de plástico con ropa podían causar el incendio; si manejaron la teoría de que alguien "tiró de afuera una bomba molotov o una botella con nafta"; por qué no probaron una simulación con un cigarrillo de marihuana, o con un sillón con telas hasta el piso que "absorbió nafta" que ya estaba en el suelo; si alguien pudo haberse tropezado con el bidón. Todas las respuestas fueron negativas.