El pronunciamiento de más de un centenar de economistas del Frente Amplio –entre los que están Mario Bergara, Álvaro García, Fernando Lorenzo y Gabriel Oddone– contra el plebiscito de la seguridad social continúa provocando diferencias en la interna de la coalición de izquierda.
La última se produjo este viernes, cuando el senador Óscar Andrade planteó su disposición a debatir tras considerar que el texto presentado el jueves tenía “algunos errores gruesos”.
“Dado que no lo suscriben solamente técnicos sino también dirigentes políticos, algunos cabeza de lista, toda la disposición a un intercambio público”, escribió en su cuenta de X (Twitter).
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Según supo El Observador, el guante fue recogido por la producción de Desayunos Informales, el periodístico matutino de canal 12, que se comunicó con Andrade y los dirigentes políticos firmantes (Bergara y García) para concertar el debate, pero la respuesta fue negativa.
Desde el equipo de Bergara transmitieron a El Observador que lo descartaron porque el Frente Amplio definió que “no se participa en debates entre compañeros”. “Para cuidar la casa común. Para nosotros la prioridad es que gane el FA. El plebiscito está en segundo plano”, señalaron.
García, en tanto, respondió a El Observador que no discutía “públicamente con compañeros” y que la vocera del grupo era la economista Jimena Pardo, especializada en temas de seguridad social y que fue una de las representantes del Frente Amplio en la comisión de expertos instalada por el gobierno.
Discusiones previas
A grandes rasgos, el plebiscito que impulsa el PIT-CNT con el apoyo del PCU y el PS plantea que la edad de retiro sea a los 60 años, equiparar las pasividades mínimas al salario mínimo y eliminar las AFAP.
La primera en criticar el documento fue la dirigente de Casa Grande, Constanza Moreira. "Respetables convicciones, pero la unidad política de la izquierda y los movimientos sociales requiere combinar la ética de las convicciones con la ética de la responsabilidad. Y yo me pregunto...¿a quien ayuda este pronunciamiento? ¿Al FA, al movimiento popular? Yo creo que no", escribió en su cuenta de X.
A su vez, la también dirigente de Casa Grande, Fabiana Goyeneche, agregó: "Cuidar al Frente, cuidar al movimiento. Defender las ideas, intercambiar sobre las diferencias, pero sin olvidar que el bloque social de los cambios es el verdadero actor de las luchas por el bien común".
Uno de los que salió a responderle a Moreira fue el exdirector de Transporte de la Intendencia de Montevideo, Gonzalo Márquez. "Parece que la libertad de acción solo corre para que las personas que apoyan el SI al plebiscito puedan manifestarse en consecuencia, pero las personas que apoyamos el NO al plebiscito deberíamos callar la boca. Curiosa interpretación", disparó.
En su documento, los “frenteamplistas por el no” plantean que la reforma que hizo el gobierno de Luis Lacalle Pou "es injusta y no soluciona los principales problemas existentes", pero que el plebiscito que propone la central sindical "tiene consecuencias injustas y genera efectos socialmente regresivos".
"Es una promesa cuyo pago no se va a poder sostener en el futuro y que generará impactos negativos", dice la página web del grupo.
